GRUTA DE LA VIRGEN DE LOURDES DE TALAGANTE

• NOMBRE: Gruta de Lourdes de Talagante.
• COORDENADAS:  33°39'54.08"S 70°55'51.86"W
• CIUDAD/UBICACIÓN: Talagante - Región Metropolitana - Chile.
• DIRECCIÓN: Costado de la Parroquia de la Inmaculada Concepción de avenida Bernardo O'Higgins, enfrente de la Plaza de Armas de Talagante, Provincia de Talagante.
• CATEGORÍA: Altar religioso.
• FAVORES SOLICITADOS: De toda clase, prioritariamente de salud, bienestar familiar y trabajo. Tiene cierta relación importante con los cuasimodistas talagantinos, de gran presencia en la fe local.
• RESEÑA: Corresponde a una popular gruta de la Virgen de Lourdes en aquella localidad, más exactamente a un costado del edificio y en la esquina ocupada por el templo de la Inmaculada. Existe cuanto menos, desde los años cincuenta. La gruta está colmada de placas de agradecimientos y poco le cambiaron el enrejado que rodea al conjunto.

La Parroquia de la Inmaculada Concepción fue fundada en 1824 por el arzobispo Ignacio Cienfuegos, ocupando primero dependencias de la antigua orden de San Francisco de El Monte. Décadas después, logra establecerse en la localidad de Talagante, proceso completado hacia mediados de 1893 en su actual ubicación junto a la Plaza de Armas y a la casa del Colegio El Niño Jesús, fundado en 1861. Durante el año anterior, sin embargo, a propósito de la visita de monseñor Mariano Casanova a la misma parroquia, se había aprobado la idea de mejorar el templo ya existente con un ensanche y aplicar algunos cambios administrativos, de paso, para que pasara a estas nuevas manos.

Entre otras cosas, Casanova autorizó que al templo se le agregaran dos naves laterales y se prolongara su pórtico, que ya había quedado estrecho para las necesidades de la feligresía. Este era, precisamente, el imponente aspecto que conservaría la iglesia en el siglo XX y tras extensos períodos de desuso por mal estado o reparaciones que se repitieron hasta los años ochenta: con base de crucero, de líneas arquitectónicas neoclásicas y pequeños detalles de evocación gótica, con vanos de elegantes arcos apuntados ojivales, incluyendo la gran puerta de la torre campanario dispuesta al frente del templo.

Se cuenta entre los habitantes que, sólo unos años después, se le adicionó al exterior del edificio una popular gruta de la Virgen de Lourdes, más exactamente a un costado de la esquina del templo. Su origen podría estar asociado a la influencia de ciertas monjas de Nuestra Señora de Lourdes en la zona geográfica, pero se cuenta que era también de la relevancia que tenía para la fe de algunos viajeros que pasaban por el entonces pueblo del camino entre Santiago y la costa, además de los huasos de la zona. Podría tratarse de la donación de uno o más devotos para la parroquia, en consecuencia.

Aspecto de la iglesia parroquial, calculamos que hacia la década del cincuenta. Se observa que ya existía al costado derecho del edificio la gruta de Lourdes que aún se encuentra allí con abundantes placas de agradecimientos. Fotografía perteneciente a Radio Manantial de Talagante. Fuente imagen: blog Chile Iglesias Católicas (W. Foral Liebsch).

Vista lateral de la actual iglesia. La gruta esta junto al paso de los peatones que bordean la avenida O'Higgins.

Reja de la gruta, antes de ser cambiada. Atrás, puertas del ala del transepto.

Placas de agradecimientos de los devotos.

Figura principal, de la Virgen de Lourdes.

La gruta ha tenido algunos cambios en el tiempo transcurrido, pero aún existe con la mayoría de sus elementos originales y colmada de placas de agradecimientos. Demostrando su popularidad en la comunidad residente, esta gruta se hizo importante en los encuentros de la fe popular de Talagante y celebraciones como la Fiesta de Cuasimodo, todavía con mucha participación y tradiciones para la comunidad local.

La costumbre de saludar a la Virgen de Lourdes al inicio y al regreso de las romerías y paseos cuasimodistas aún se mantiene. Por tratarse la plaza de un importante centro de encuentro social para Talagante, además, el icono de la gruta mariana parece ser un elemento de mucha distinción identitaria local, habiendo muy poca información disponible o conocimiento siquiera sobre su existencia afuera de la localidad. Esto no impide que la misma tenga devotos de lugares tan distantes como Santiago, San Antonio o Valparaíso, según hemos sabido.

En años más recientes, tras sobrevivir a los terremotos de 1985 y 2010 que castigaron severamente a la iglesia, se cambió el enrejado que rodea a la gruta mariana. La cantidad de placas de agradecimiento confirman que sigue muy vigente como objeto de devoción y rogativas entre la población talagantina.